ATHLETIC DE BILBAO 1-3 BARCELONA

El Barcelona se impuso por 1-3 al Athletic Club en San Mamés en un partido en el que el equipo rojiblanco se adelantó en igualdad numérica y que luego remontó el azulgrana estando en superioridad tras la expulsión de Casas.

Aunque el marcador lo fueron concretando Yeste, que puso el 1-0 con un golazo, Puyol, Gudjohnsen y Saviola, quizás la acción más relevante del encuentro fue la tarjeta roja a Casas en el minuto 22, en una jugada en la que derribó al ariete islandés estando Sarriegi muy cerca de ambos.

Con este resultado, el equipo de Frank Rijkaard consolida el liderato a la espera de lo que ofrezca el resto de la jornada, y el de Félix Sarriugarte, sigue varado en zona de descenso.

El conjunto vasco, no obstante dio la mejor imagen en lo que lleva de temporada y dio sensación de haber sido un rival de cuidado para el Barcelona de no haberse quedado tan pronto con uno menos.

De inicio, el Barcelona ofreció el once esperado, sin Iniesta, y el Athletic un dibujo 4-2-3-1 idéntico al de la semana pasada en Getafe, con la entrada de Casas, Etxeberria y Llorente por el lesionado Amorebieta y los sancionados Murillo y Aduriz.

La presencia de Etxeberria hizo del equipo rojiblanco más ofensivo que seis días antes, ya que Iraola retrocedió al lateral para protagonizar su duelo con Ronaldinho que empieza a tener aire de clásico.

El Barça, con su habitual 4-3-3, tuvo problemas para hacerse como acostumbra con el ritmo del juego. El Athletic dificultaba la salida del balón de Márquez y Edmilson, presionaba lo suyo a Xabi y Deco, y contaba con sus opciones cuando robaba cerca del medio campo rival.

Así se fraguó el primer gol del partido. Yeste se aprovechó de una recuperación, se plantó ante dos defensores al borde del área escorado a la izquierda y cedió a la entrada por banda de Llorente. El joven ariete centró con la izquierda, el balón salió rechazado tras dar en Márquez y Yeste, que ya se había ido al centro del área, enganchó un voleón ante el que nada pudo hacer Valdés.

Se le ponía relativamente pronto de cara el partido al Athletic, que aún gozó de otra buena ocasión, de Garmendia tras un error de Valdés, antes de que llegase una jugada que condicionó mucho el resto del choque: la expulsión a Casas.

El lateral vizcaíno derribó a Gudjohnsen cuando islandés se iba hacia la meta de Lafuente y Fernández Borbalán tomo una decisión cuestionable, ya que algo más retrasado que Casas se encontraba Sarriegi con opciones de salir a la ayuda de su compañero.

Cambió la perspectiva y ambos técnicos movieron ficha. Sarriugarte para suplir al lateral expulsado, por lo que entró Expósito en lugar de Llorente, y Rijkaard para tener todavía mayor presencia ofensiva y relevó a Edmilson por Giuly.

Con Xabi de medio centro, Ronaldinho en medio campo y Giuly en la banda derecha el Barça se dispuso asediar al Athletic, pero no llegó a hacerlo del todo.

La enorme posesión de balón visitante apenas si había derivado en algunos tiros lejanos, entre los cuales solo uno de Ronaldinho de falta y otro de Xabi tuvieron peligro, cuando, justo al filo del final del descuento del primer periodo, llegó el empate a uno.

Gudjohnsen centró desde la izquierda y Puyol, forcejeando con Ustaritz, remató sobre un sorprendido Lafuente.

El segundo mazazo sicológico que recibió el Athletic estuvo a punto de tener continuidad nada más comenzar la segunda parte con un disparo al palo de Márquez desde el vértice del área.

Le costaba al Barcelona hacerse con el control del juego a pesar de su superioridad, pero a la hora de partido un pase en profundidad de Deco dejó a Gudjohnsen para que el sustituto de Eto'o adelantase a su equipo.

Ese tanto finiquitó el choque, aunque tanto Ronaldinho, con una preciosa vaselina que se le fue fuera, como Gabilondo, con un disparo que detuvo Valdés en el primer palo, pudieron variar el marcador.