BARÇA 3 - 1 Celta

El FC Barcelona sigue líder de Primera División tras golear por 3-1 al Celta en un partido en el que ha tenido que trabajar mucho para quedarse con los tres puntos.

Con bastantes bajas (Messi, Eto'o, Márquez, Sylvinho y Thuram), Frank Rijkaard sólo introdujo una novedad destacada en el once inicial. Pero no se puede hablar de sorpresa, porque el técnico ya adelantó el sábado que Iniesta 'haría' de Giuly.

El Barça, para muchos, pasaba un examen en el Camp Nou. Un Camp Nou, por cierto, que en muchos momentos se parecía más a un cine que a un campo de fútbol. Y es que en ocasiones, incluso ya con el 1-0 a favor, el silencio se podía cortar con un cuchillo. Y es que, es verdad, el equipo sigue sin deslumbrar. Eso si, todo hay que decirlo, conscientes de que no están para tirar cohetes, los jugadores - del primero al último - se ponen el mono de trabajo para, como mínimo, intentar sacar los partidos adelante.

Contra el Celta se vivió en los primeros 45 minutos un monólogo. En toda la primera parte, los visitantes ni siquiera chutaron una vez a portería ni hicieron una sola ocasión de peligro. El problema es que el Barça hizo poco más. Con el rival encerrado cerca de su área, si tu no estás fino, tienes problemas. Y el Barça los tuvo. De hecho, no fue hasta el minuto 16 cuando el Camp Nou pudo gritar "uuuyyyy". Edmílson disparó de lejos y el portero Pinto mandó el balón a córner. Y el grito se repitió en el minuto 19 cuando Xavi remató un buen pase de Saviola y de nuevo el guardameta mandó el balón a córner.

Se veía que el partido sería complicado. Pero Saviola lo hizo un poco más fácil. En el minuto 34, Gio le mandó un buen centro desde la izquierda y el argentino, saltando bastante porque altura no es que precisamente le sobre, remató de manera excelente de cabeza para batir a Pinto. Era el 1-0. Lo más difícil, sobre el papel, estaba hecho. Hasta el descanso, poco más. Sólo que Canobbio se jugó la expulsión cuando con Deco en el suelo le pisó. Pequeña tangana, pero nada más. Todos al vestuario.

En el segundo tiempo, al Barça le costó entrar en el partido. El Celta empezó dominando, aunque sin crear ocasiones de peligro claras. Los blaugrana parecía que reaccionaban pero era con disparos lejanos. Uno de Deco (10') y otro de Ronaldinho al lanzar una falta directa (13') despejados los dos por el portero Pinto. El Barça necesitaba marcar para evitar cualquier accidente.

Y el accidente llegó. Una caída de Angel dentro del área, entre Gio y Oleguer, le hizo pensar al árbitro que aquello era penalty. Sólo lo vio él. En realidad, chocaron los dos jugadores del Barça pero Delgado Ferreiro (debutante en primera División pero tan malo como sus compañeros) pitó penalty. Y Nené marcó el 1-1.

Rijkaard reaccionó dando entrada a Giuly por Edmílson. El Barça fue a por el partido, una vez más, con más ganas con acierto. Deco disparó alto y Saviola tuvo dos ocasiones claras, pero sus disparos salieron altos. Y si el 1-1 había llegado en un penalty polémico, lo mismo pasó con el 2-1. Falta sobre Gio. Según el árbitro, dentro del área, según los jugadores del Celta, fuera. La verdad es que es muy difícil de decir. Pero lo único claro es que Ronaldinho lanzó el penalty, fuerte y alto, y marcó.

El Celta, a pesar de todo, no le perdió la cara al partido y buscó de nuevo el empate. Núñez lo tuvo (37') en un disparo que Valdés despejó con dificultades. Pero el Barça no quería sorpresas. Y finiquitó el partido con un rápido contragolpe de Giuly, solo tras un gran pase de Deco, que batió a Pinto de disparo raso.

Y se acabó lo que se daba. Victoria justa del Barça que sigue sin encontrar su mejor juego pero ante el Celta se puso el mono de trabajo y así suplió su falta de inspiración. Los resultados vuelven a acompañar. Ahora falta que el equipo recupere la confianza que le debe devolver al juego al que nos tenía acostumbrados.

Betis 1 - 1 BARÇA

El Barça se llevó un empate del campo del Betis que lo sitúa como líder en solitario, pero sigue sin expresar demasiada mejoría en su juego. Márquez igualó el tanto inicial del brasileño Robert en otro partido gris y para olvidar en el que el Barcelona no supo sentenciar al final.

El Barça quiso pero no pudo con un flojo Betis. Mereció incluso al final la victoria pero se quedó en un empate. Mejoró algo su juego respecto a las últimas fechas pero sigue sin ponerse del todo las pilas. Un gol de Márquez de cabeza tras un córner igualó después del descanso el primer tanto del bético Robert al final de la primera parte. Sigue líder, en solitario, un punto por delante del Sevilla y el Madrid, pero le queda mucho por hacer todavía.

El Barça volvió a dar mala imagen en los primeros 45 minutos. Malas vibraciones. Y además un gol en contra. Robert, de cabeza, en el minuto 36, completamente solo y mal defendido por Gio en el primer palo de Víctor Valdés, adelantó al Betis en el marcador. El brasileño aprovechó una asistencia de cabeza de su compañero Nano desde el segundo palo en un córner muy bien botado por Assunçao.

Saltó la diferencia entre dos equipos que jugaban poco, muy poco al fútbol. Un partido más que gris pero, por otra parte, muy abierto de salida. El Betis reforzó el centro del campo con hasta cinco mediocampistas para controlar el juego azulgrana, pero el Barça, en los primeros instantes, parecía querer mandar sobre el césped. Se intuía una pequeña mejoría tras el pobre recital del domingo ante el Nàstic.

Rijkaard cambió de salida dos posiciones defensivas -Márquez y Gio por Thuram y Zambrotta- y dos más en el mediocampo -Iniesta y Motta por Xavi y Edmílson-. Cuatro cambios para lavar la cara a un equipo que arriba mantenía a Giuly, Saviola y Ronaldinho.

Tres incursiones ofensivas iniciales de los béticos sin mayor peligro (Sobis (2) y Assunçao) ofrecían un toma y daca engañoso. El Barça llegó por primera vez al área de Doblas en el minuto 11, tras un remate acrobático de Giuly que acabó con un disparo sin mayor historia de Deco.

Ronaldinho, pese a no acertar en su excesivo individualismo, garantizaba un mayor ímpetu y esfuerzo, sin resultado aparente. Le ponía más ganas que ante el Nàstic pero sin efectividad. Sólo alguna acción aislada y de un bullicioso Deco mantenían el equilibrio.

El juego era demasiado lento, pero el Barça imponía el dominio. 'Ronnie' lo intentó fallidamente en el 33, Saviola con un disparo cruzado y Deco dos minutos antes. Pero el Betis se llevó el gato al agua. Robert adelantó a los suyos y dio excesiva ventaja a un Betis que no se lo esperaba antes del descanso.

Assunçao salió dispuesto en un lanzamiento de falta directa desviado a sentenciar en la segunda parte para un más que flojo Betis. Pero el Barça quiso cambiar las tornas y empezar a mostrar algo, poco pero algo más de juego. Empezó a controlar el partido y atacar con más insistencia ante un casi inactivo Doblas. Seguía el Barcelona demasiado espeso pero se le veía, eso sí, un pelín más ambicioso e intenso.

'Ronnie' y Giuly, poco afortunados, llegaban con mayor peligro y en los primeros diez minutos de la reanudación se lanzaron hasta tres córners. Se olía el empate y tras una media vuelta, vista y no vista, de Ronaldinho, llegó otro córner a favor. Deco, uno de los mejores azulgranas en el Ruiz de Lopera, centró y Márquez, de cabeza, peinó hacia atrás al primer palo. 1-1, minuto 60, y el encuentro, más de cara para el Barça.

El empate coincidió con la entrada de Gudjohnsen por Saviola al terreno de juego. El islandés se mostró más activo y participativo en ataque y el Barça experimentó una ligera mejoría arriba. La posterior entrada de Xavi también aportó mejores maneras a los barcelonistas. Pero no llegó la puntilla. El Barça acabó desdibujado ante otro rival muy débil, con el últimamente habitual 'quiero y no puedo' de los hombres de Rijkaard, sin suerte en ataque pero con excesivo desacierto.

BARÇA 3 - 0 Nástic

El Barcelona se resarció de su última derrota en la Liga contra el Espanyol con una fácil victoria ante al Nàstic en el Camp Nou (3-0) y es el nuevo líder de la Liga y el campeón de invierno. Saviola y Giuly marcaron los tantos azulgranas en el peor partido del Barça esta temporada en el Estadi.

El Barça consiguió el objetivo previsto: ser campeón de invierno y recuperar el liderato y la senda de la victoria en la Liga, a costa de un débil Nàstic que acabó goleado con total claridad (3-0), con dianas del enrachado Saviola, Giuly e Iniesta. Y con la ley del mínimo esfuerzo. Otro partido para olvidar y el Barça ya se parece al Madrid de Capello: gana sin convencer ni dar espectáculo.

Frank Rijkaard dispuso de inicio un equipo nuevo, con hasta cinco cambios respecto a la última derrota en la Liga contra el Espanyol. Tres novedades en defensa -Oleguer, Thuram y Zambrotta- por unos 'castigados' Belletti, Márquez y Gio, una en el centro del campo -Deco por Iniesta- y una delante más que cantada -Saviola por Gudjohnsen-. El Nàstic, por su parte, hizo debutar al 'Pampa' Calvo y César Navas en la zaga, sus dos novedades del mercado de invierno.

El Barça empezó de la peor manera: ofreciendo más de lo mismo. Sin ritmo, sin control de balón, sin precisión en el pase. Ni ante el colista de la Liga, un Nàstic desubicado pero con más ganas que los azulgranas, parecía el Barcelona querer pasar página y mejorar un juego que seguía sin aparecer. Otra vez desaparecidos en combate.

El grana Abel Buades dio el primer aviso en un disparo alto en el minuto 10 y Calvo anulaba completamente a un desaparecido de nuevo Ronaldinho. Hasta la llegada, cómo no, del 'Conejo'. No hay nada como estar y sentirse en racha.

Saviola adelantó al Barcelona con un remate a la media vuelta en el minuto 17 que tapaba todos los males del Barça. 1-0, liderato y campeonato de invierno. El enrachado 'Pibito' aprovechó uno de tantos despistes defensivos del Nàstic en esta Liga y marcó tras recibir una asistencia de... Oleguer.

El canterano, por sorprendente que parezca, se convirtió en el mejor azulgrana de la primera mitad. Su capacidad de desborde, su ambición ofensiva, su hambre de balón valía por todos sus compañeros. Arriba y abajo, Oleguer, omnipresente y un espejismo en un desierto de juego culé.
Pero nada cambió tras el gol. O fue a peor. Tímidos silbidos en el minuto 35. Por una vez, y sin que sirva de precedente por aquello de la obligación de animar siempre al equipo de casa, fueron justos. El juego del Barça brillaba por su ausencia. Sin tensión, sin intensidad, sin motivación. Como ya va siendo habitual en los últimos encuentros para más desgracia barcelonista. El equipo no funciona y ya empieza a ser preocupante.

Saviola remató de cabeza al palo, tras una falta previa, en el minuto 37 y el árbitro no vio un claro penalty de Mingo a Giuly en el 39. Claro que también perdonó la clara expulsión de Deco cuatro minutos antes. Y llegó el silencio. O el pasotismo, llámenle como quieran, de los casi 75.000 espectadores ante el mal juego del equipo. Descanso y a verlas venir en la segunda parte.

MÁS DE LO MISMO

El bostezo se hizo ya insostenible en la reanudación. ¿Y el rival? Ni se le vio en la primera mitad y poco, muy poco, en la segunda. Inocente y flojo como el propio encuentro. Un Barça sin actitud, con desidia y con muy poca voluntad, apenas ofreció chispas, chispitas, de algo denominado en su día fútbol. Pero es que ya ni corren. Igual es que van tan sobrados que se piensan que los partidos se ganan solos.

Rijkaard debe reconducir todo esto. Y con la máxima rapidez posible para salvaguardar debacles mayores mucho más adelante. ¿O es que el 'salvador' Eto'o podrá con todos los problemas de golpe? Ni con Iniesta en el campo. Perdonen, pero minuto 60 y ni una jugada de peligro ante el marco de un Bizzarri totalmente inactivo. Están todos completamente 'out' y protagonizan un partido único por horroroso y nefasto como no se había visto hasta ahora esta temporada en el Camp Nou.

Primer disparo a puerta tras el descanso. Oleguer, minuto 61. Sobran las palabras para explicar lo que está pasando sobre el césped. Desconocido Barça o no, conocido según el rendimiento de los últimos encuentros. ¿Hasta cuándo? Ya se pondrán las pilas cuando vengan los buenos. La mentalidad ya se supone volverá con los grandes.

Segundo disparo. Oleguer, de nuevo, minuto 64. Ni se lo cree. Es el único que se atreve a llegar arriba. Rechaza Bizzarri y Giuly envía fuera por poco. Por fin una mínima jugada trenzada de peligro. Oleguer, el único, salido del todo. Excelente su partido 100 con la camiseta barcelonista.

Pero quedaba lo mejor de la esquizofrenia culé. Kafkiano. Cambio de Guddy por Saviola y pitada general a Rijkaard. Casi nada. Claro que el mundo del balón pone a cada uno en su sitio y, en la jugada siguiente (minuto 67'), gol de Giuly. La sentencia. Centra Ronaldinho (¿ah? ¿pero jugaba?) desde la derecha al segundo palo y remata el islandés Gudjohnsen de cabeza, picando de arriba a abajo, salva bajo los palos Abel Buades y el rechace, a la media vuelta, del pequeño gran hombre Giuly, que acaba dentro de la portería tras tocar en César Navas. 2-0 y a no sufrir.
Pero tiempo hubo hasta de un tercero. Aunque sólo fuera para confirmar que la del Nàstic es una de las peores defensas de la Liga, tras una monumental 'pájara' general de la zaga grana, Iniesta aprovechó con un tiro ajustado al palo con la izquierda para cerrar un partido (3-0) que, visto lo visto, no pasó a la historia. O sí, a la de los encuentros para quitar cuanto antes de la mente.

Goleada y silbidos. El Camp Nou no es resultadista y no quiere parecerse en nada al Bernabéu. Líderes, igualados a puntos con el Sevilla, campeones de invierno y con un partido menos. El miércoles, contra el Betis en el encuentro aplazado, incluso pueden desmarcarse en la cabeza de la tabla.

CIRCO MERENGUE

GUTI SIGUE SIENDO UNA PROMESA", ASEGURÓ EL PRESIDENTE DEL MADRID

Calderón: "Beckham se va a Hollywood a ser un medio actor"

Ramón Calderón, presidente del Real Madrid, volvió a criticar a David Beckham por anunciar su fichaje por Los Angeles Galaxy. en el Centro Universitario Villanueva. Si este lunes aseguró que el inglés "ha toreado al Madrid", este martes afirmó que Beckham "se va a Hollywood a ser un medio actor". Calderón hizo este comentario en la conferencia que ofreció, en la que acusó al ex presidente Florentino Pérez de boicotear el fichaje del brasileño Kaká, jugador del Milán.

El presidente del Real Madrid, señala la cadena COPE, consideró que ha sido un acierto de la dirección deportiva del club blanco no renovar a Beckham y que el jugador inglés se marcha a Los Ángeles ante la ausencia de ofertas importante. "David Beckham va a ser un medio actor de cine viviendo en Hollywood. La prueba del acierto de la secretaría técnica de no considerar la continuidad ha sido ratificada por todas las secretarías técnicas del mundo porque nadie, estando libre, le ha querido", afirmó Calderón.

Calderón acusó a Florentino Pérez de sabotear el fichaje del brasileño Kaká: "Florentino Pérez, que no me ha apoyado a mí precisamente, habló con Silvio Berlusconi (dueño del Milan) para que renovara a Kaká, y Berlusconi se apresuró a renovarle", dijo.

"Guti sigue siendo una promesa"

Calderón tuvo palabras para todos y uno de los objetos de su ataque fue el centrocampista Guti, segundo capitán del equipo. "Raúl empezó con Guti y éste, con 31 años, sigue siendo una promesa", opinó ante una sorprendida audiencia.

El presidente madridista prosiguió con su ataque y ofreció su opinión sobre el vestuario del Real Madrid: "Hay vanidad, ego, todos tienen la sensación de que son superfiguras... Un jugador del Real Madrid nunca paga donde va". "Vosotros tenéis cultura y formación", afirmó dirigiéndose a los estudiantes, "ellos generalmente no la tienen", sentenció.

Igualmente, reveló interioridades como las diferencias contractuales para apoyar las distancias en el vestuario. "Iker Casillas (portero titular) cobra nueve millones de euros al año y Diego López (su suplente) gana 300.000 euros", descubrió.

Al Bernabéu, como al teatro

Finalmente, Calderón criticó la supuesta pasividad de la afición que acude al coliseo del Santiago Bernabéu. "Es un estadio al que la gente va como a un teatro. La gente no anima, al contrario que en Italia o Inglaterra".

BARÇA 3 - 2 Alavés

Saviola logró un 'hat-trick' y el Barça ya está en cuartos (3-2)

El Barça selló esta noche el pase a los cuartos de final de la Copa del Rey tras vencer por 3-2 al Alavés en un gran partido de Javier Saviola. El argentino marcó los tres goles de su equipo.

Saviola dio el triunfo en un discreto partido de los azulgranas. El argentino está en racha y aprovechando al máximo las pocas oportunidades que le están dando esta temporada. Su efectividad va camino del récord. En sólo una semana, ha marcado 6 goles: dos en el partido de ida, en Mendizorroza; uno en Montjuïc, ante el Espanyol; y, este martes, puso la guinda con un hat trick que, sin duda, reavivará el debate sobre su futuro. El 'Pibito' queda libre en junio y el Barça no parece por la labor de renovarle. ¿Servirán estos tres goles para evitar su marcha?.

El 0-2 del encuentro de ida, disputado hace una semana en Vitoria, había dejado la eliminatoria sentenciada. Así las cosas, y ante un Camp Nou con media entrada (apenas 40.000 espectadores), el Barça presentó un once poco habitual. Rijkaard dio descanso a Deco y Gudjohnsen, que ni siquiera fueron convocados. Jorquera relevó a Valdés en la portería, Oleguer entró como lateral, Motta formó con Gio y Xavi en la media y Ezquerro, con Saviola y Ronaldinho, formó la tripleta de ataque.

Más sombras que luces

El partido empezó a un ritmo bastante alto. El 1-0 llegó apenas superado el cuarto de hora. Ronaldinho lanzó una falta desde el vértice del área y Ardouin rechazó con los puños con tan poca fortuna que el balón, tras rebotar en Saviola, se coló en la portería.

El propio argentino selló el 2-0 muy poco después, en el minuto 21. Motta centró al área y el 'Pibito', con un espectacular remate de cabeza desde más allá del punto de penalty, marcó por toda la escuadra. Un golazo a la altura de los mejores cabeceadores, a pesar de su estatura: 1'68 metros.

El Barça soltó entonces el pie del acelerador y, fruto de su exceso de confianza, el Alavés acortó distancias. Como viene siendo habitual en los últimos partidos, Wellington aprovechó una falta de coordinación e intensidad de la media y la defensa azulgrana y, tras recibir un pase en profundidad, batió a Jorquera con un suave remate picado (2-1, 35').

Los vitorianos se crecieron y Arthuro empató poco antes del descanso al materializar de forma magistral un lanzamiento de falta (2-2, 42'). Su disparo de rosca, desde unos cinco metros fuera del área, sorteó a la barrera y se coló muy ajustado al poste.

'Pájara' tras el descanso

Frank Rijkaard había admitido en la víspera que su equipo aún no está a tope desde el punto de vista físico. Y los hechos parecían darle la razón. El Barça salió dormido en la segunda mitad, y su escasa presión sobre el rival estuvo a punto de costarle otro gol. En el 49', Márquez perdió un balón en la media, Wellington se escapó por velocidad y, tras superar a Jorquera, su remate lo acabó sacando Puyol bajo los palos.

Los azulgranas no encontraban la forma de zafarse del asedio vitoriano y poco después, en el 51', un remate de cabeza de Arthuro a la salida de un córner salió rozando el poste.

Pero cuando peor pintaban las cosas, el Barça volvió a sacarse al 'conejo' de la chistera. Saviola, astuto él, recibió una al borde del área una magnífica asistencia de Xavi al más puro estilo Laudrup y, rompiendo el fuera de juego, batió a Ardouin con un preciso chut (3-2, 62').

A partir de ahí, el partido ya no tuvo más historia. Lo más destacable, si acaso, fue un remate de Ogbeche al poste, que pudo haber significado el empate. Pero el resultado ya no varió. el objetivo ya estaba cumplido, y el Barça ya está en cuartos de final de la Copa. El viernes, en el sorteo, conocerá a su próximo rival.

Pájaros degollados 3 - 1 BARÇA

QUE VERGUENZA, QUE BOCHORNO, QUE RÍDICULO. Esta derrota va a hacer mucho daño. En liga de los últimos 5 partidos: 1 victoria, 1 derrota y 3 empates, algo pasa aquí ( y sin contar el ridículo del Mundialito )
Hoy una parte de la culpa la tiene Rijkkard con cambios estúpidos y sin sentido. ¿Por qué pone iniesta a la derecha?¿Por qué cuando el equipo empata y puede ir hacia arriba quita mete a otro defensor en vez de ir a por el partido?¿Por qué cuando se lesiona un centrocampista vuelve a meter a otro defensa con 2-1 en el marcador?

Valdés: 7, Bastante bien y evitó un 7-1 tranquilamente.
Belleti: 0, Vale ya con la cancioncita de que es el heroe de la final. Menudo coladero, ni atacar ni defender. Prefiero un lateral que de patadas pero que defienda antes que un coladero.
Gio: 2, Vaya autopista tenía en su banda.
Marquez: 0, Vaya partidito se ha marcado, le han ganado la gran mayoría de los balones por alto, por abajo, malos controles, malos pases...
Puyol: 9, El único que ha puesto garra y ha jugado muy bien, poco que decir.
Iniesta: 8, Hasta que ricitos lo mandó a la banda de manera incomprensible jugó muy bien, otro partidazo.
Edmilson: 0, En su línea. El primer gol culpa suya.
Xavi: 6, Normalito, hay que entender que no es lo mismo jugar con el motor de este equipo 8Deco) que acompañado de Edmílson...
Giuly: 2, El pobre lo intenta, pero es que no da para más.
Ronaldinho: 2, Un chute decente en todo el partido !!!!! En los primeros minutos y ya está, se acabaó el partido para el brasileño.
Gudcrack: -2, Estorbo. Cada vez está más claro que se equivocaron al ficharlo, no es delantero para el Barça y menos para suplir a Eto'o.
Saviola: 8, 16 minutos y golito, máxima efectividad.

Y ahora dirán, esta derrota les servirá para ponerse las pilas, como pasó en el Mundialito...

Alavés 0 - 2 BARÇA

El Barça superó con facilidad pero menos acierto ofensivo del previsto al Alavés (0-2) en la ida de los octavos de final de la Copa del Rey. La vuelta, en el Camp Nou el próximo martes, queda prácticamente sentenciada

El Barça resolvió con menos facilidad de la prevista con dos goles de Saviola, uno en el inicio del segundo tiempo, al materializar una excelente por rápida y espectacular jugada individual combinada con Giuly, y otro de cabeza, a diez minutos de la conclusión. La poca efectividad de los azulgranas de cara a la meta del Alavés evitó que el resultado fuera más abultado en un encuentro gris de juego, en el que sólo brillaron el argentino y la conducción de Xavi.

Frank Rijkaard dispuso en Mendizorroza la misma alineación del pasado domingo en Getafe, con la novedad habitual en la Copa del meta Jorquera por Víctor Valdés y la entrada de Saviola en punta de ataque por Gudjohnsen. Y poco cambió la tónica, pese a la debilidad del rival, un flojo Alavés con entrenador nuevo, Fabri, pero con más problemas en poblar una grada semivacía en oposición a su presidente, Dimitri Piterman, que en evidenciar que es, al menos, un equipo de Segunda División.

El Barça sí mejoró el juego del último partido de Liga en los primeros compases del duelo, con un dominio abrumador que rozó el 75% de posesión de balón en los diez primeros minutos. El fútbol-control dio paso a numerosas llegadas a la puerta del Alavés, pero sin apenas acierto ofensivo. La falta de gol resultó preocupante en la primera mitad, salvo en una esporádica ocasión de Xavi, en el minuto 20, al disparar a las manos de Ardouin la mejor jugada de peligro trenzada por los azulgranas, a partir de un centro de Ezquerro y una dejada de un activo pero poco inspirado Saviola hasta entonces.

Xavi dio las únicas chispas de buen juego azulgrana en un aburrido primer periodo, en el que los azulgranas lo intentaron, sin embargo, en un chut desviado de Iniesta, primero, en el minuto 10 y en un remate inverosímil de tacón del 'Pibito' en el 33 a centro de un ineficaz cara a gol pero bullicioso Giuly.

El Alavés ni existió. Sólo el ex españolista De Lucas remató alto en el 38 y cedió la mejor internada ofensiva de los locales a Aloisi en el minuto 21. En la segunda parte, más de lo mismo. Dominio total del Barça y a verlas venir los blanquiazules, para salvar un marcador que con un empate o una derrota por la mínima sabía a gloria.

Poca historia más hasta la llegada del 0-1. Antes un remate de cabeza muy poco afortunado de un desacertado Ezquerro, solo, en el minuto 49 que desaprovechó un centro medido de Sylvinho. Saviola sí estuvo acertado ocho minutos después tras trenzar una excelente jugada con Giuly y cruzar de forma inapelable para el meta Ardouin. La inefectividad rematadora se salvó con una genialidad del argentino.

Iniesta, en el 68, chutó bien pero desvió mejor Ardouin, sólo instantes antes del show de las gradas, con acercamiento de los aficionados disconformes con su presidente Piterman para increparlo con fuerza. Con la bronca en la tribuna, al grito de 'que se vayan', poco quedaba ya de encuentro para poder ser seguido con relativo interés.

El Barça pareció contagiarse del malestar general y, aunque mantenía el control con el resultado a favor, no se atrevía a sentenciar la eliminatoria. Hasta la llegada de un córner botado por Xavi, el mejor azulgrana en Mendizorroza, en el minuto 80. Márquez remató de cabeza en primera instancia y en picado para aprovechar enseguida Saviola, también de cabeza, para sentenciar el encuentro y, a buen seguro, la eliminatoria.

El próximo martes, en el Camp Nou, con igual mucho más cemento en las gradas, los azulgranas deberán dejar finiquitada la clasificación para los cuartos de final de una poco atractiva Copa del Rey.

Getafe 1 - 1 BARÇA

El FC Barcelona salvó un punto en su visita de este domingo a campo del Getafe. Xavi, en ausencia de los sancionados Ronaldinho y Deco, ejecutó de forma magistral un lanzamiento de falta y selló el 1-1 definitivo en un flojo partido.

El conjunto azulgrana desperdició una buena ocasión de alcanzar al Sevilla en el liderato de la Liga, después de que los andaluces perdieran el sábado en Zaragoza (2-1). Y suerte tuvo de 'arañar' un punto, porque pudo ser peor. Ahora, los de Frank Rijkaard siguen segundos en la Liga, a dos puntos del primer clasificado, aunque con un partido menos: el pendiente ante el Betis que se disputará el próximo 24 de enero.

El conjunto azulgrana se enfrentaba este domingo a un doble rival: el Getafe, por descontado; pero también contra algunos elementos que no jugaban, precisamente, a su favor. Empezando por las bajas. Hasta 8 jugadores se perdieron la cita de este domingo en el Coliseo Alfonso Pérez. Y menudas ausencias: Ronaldinho y Deco, por sanción; Eto'o, Messi, Zambrotta, Thuram y Oleguer, por lesión; y Motta, por estar renqueante de un proceso gripal. Ahí es nada...

A ello había que sumar la falta de ritmo de partidos a causa del parón navideño, ya que el tono físico del equipo aún no es el mejor. O el revuelo organizado por los retrasos de Ronaldinho, Deco y Márquez en incorporarse a los entrenamientos de esta semana, que hizo que en el entorno del club apenas se hablara del partido de este domingo. Y un detalle más, y no menor: enfrente se encontraba la defensa menos goleada de la Liga. Tan sólo 11 goles había encajado el Getafe en las primeras 16 jornadas.

El panorama no pintaba, por tanto, demasiado bien para los de Frank Rijkaard, que llegaban a Getafe con lo puesto. La única duda en el once estaba en quién se disputaría una de las plazas en la delantera: Saviola o Ezquerro. Y el técnico, una vez más, volvió a apostar por el riojano.

El Barça se limitó a mantener el tipo en una primera parte bastante gris. Tan gris como la tenue niebla que, por momentos, hizo temer por la suspensión del encuentro. Una medida que, por fortuna, no hizo falta tomar.

Los dos equipos optaron por no correr riesgos y el juego horizontal fue la tónica dominante antes del descanso. En 45 minutos, tan sólo se vieron dos ocasiones de peligro, una por equipo. El Barça rozó el gol a los 12 minutos, cuando Gudjohnsen, tras recibir un gran pase en profundidad de Márquez, se plantó solo ante Abbondanzieri, pero su chut raso y cruzado salió rozando el poste. Y poco después, en el 23', llegó la réplica en un mano a mano de Güiza que Víctor Valdés desbarató con agilidad.

Mazazo de Güiza... y golazo de Xavi

El Barça denotaba una preocupante falta de ideas. Y la segunda parte no pudo empezar peor. Nada más comenzar, en el 53', fruto de un error defensivo increíble, llegó el 1-0. Márquez cedió mal el balón hacia atrás a Valdés desde casi el mediocampo, y Güiza aprovechó el 'regalo' del defensa mexicano para marcar. El delantero local, completamente solo, encaró al meta azulgrana y le batió por raso.

Las cosas iban mal. El Barça no funcionaba, el Getafe se había crecido. Pero, mira por dónde, el día en que faltaban los dos mejores lanzadores de falta del equipo -Ronaldinho y Deco-, llegó el empate gracias a un libre directo. Iniesta, tras una estupenda jugada indivudual, fue derribado por Vivar Dorado al borde del área. Y Xavi ejecutó la falta de forma magistral. El de Terrassa se 'disfrazó' de Ronaldinho y su disparo se coló por toda la escuadra (1-1, minuto 69').

El gol pareció dar alas a un Barça que, hasta entonces, parecía dormido. Giuly estuvo a punto de marcar el 1-2 al engatillar un potentísimo desde la frontal que Abbondanzieri despejó con los puños (80'). Y, en el córner consiguiente, el galo intentó sorprender con una vaselina que salió por encima del larguero.

Por fortuna, las últimas embestidas del Getafe no surtieron efecto (Valdés, de nuevo magnífico, despejó 'in extremis' un trallazo de Cotelo, en el 89'), y el marcador ya no varió. Ya en los últimos instantes, el canterano Olmo debutó con el primer equipo entrando en sustitución de Edmílson, que se retiró renqueante. Esperemos que no sea una nueva lesión...

Luz verde al nuevo Camp Nou

En septiembre se cumplen 50 años de la inauguración del Camp Nou. Para entonces el club espera tener aprobado el proyecto definitivo. El club desea que el Estadi sea una referencia a nivel mundial.



La junta directiva del FC Barcelona persigue el sueño de que el Camp Nou y su entorno, después de la ampliación y la remodelación que sufrirán en los próximos años, sea un referente mundial a nivel arquitectónico, turístico y deportivo.
Un proyecto que el club desea que también sientan como propio todos los vecinos de Les Corts y el Ajuntament de Barcelona. Sin su aprobación, implicación y apoyo será imposible sacar adelante esta obra civil que cambiará la cara a una de las zonas más importantes de la Ciudad Condal.

El año que acabamos de estrenar adquiere una especial significación porque el 24 de septiembre se cumplirán las Bodas de Oro del Camp Nou. Cincuenta años de vida de uno de los campos de fútbol más emblemáticos del mundo y que el FC Barcelona querría celebrar presentando públicamente el proyecto definitivo.

Precisamente durante el presente mes de enero se van a iniciar las conversaciones a tres bandas entre el Ajuntament, FC Barcelona y el Col.legi d’Arquitectes de Catalunya para fijar el calendario de presentación de los proyectos. El FC Barcelona convocará un concurso abierto que, muy probablemente, será supervisado por el citado colegio profesional, por lo que tendrán cabidas las ideas y propuestas de los arquitectos catalanes.

Dado que todavía no existe el proyecto definitivo, es imposible saber a ciencia cierta cómo será el futuro Camp Nou y cómo quedará su entorno. Sí que hay, desde luego, muchas ideas. Unas ideas que después podrían hacerse realidad, cumplirse en parte o simplemente quedar en aguas de borrajas.

Sí se sabe, por ejemplo, que la tercera gradería será ampliada, pero se desconoce al día de hoy cuántos nuevos asientos representará. Se ha venido sosteniendo que el Camp Nou crecerá en 15.000 nuevas butacas, pero en realidad ese número sólo podrá conocerse cuando se presente el proyecto definitivo. Hay que tener en cuenta que se harán muchos retoques dentro del Estadi y habrá una reordenación de los asientos disponibles.

La junta directiva del FC Barcelona, según ha podido saber SPORT, ya ha hecho una primera valoración del coste que tendría la remodelación y ampliación del Camp Nou, la construcción del nuevo Palau Blau Grana (que será un pabellón multiusos de última generación) y la reordenación del entorno, con la construcción de nuevos viales, plazas, zonas verdes y otros equipamientos. La cifra total ascendería a un mínimo de 350 millones de euros, 58.000 millones de las antiguas pesetas. Hay que tener en cuenta que el presupuesto del club azulgrana para esta temporada es de 300 millones.

El nuevo Camp Nou representaría un desembolso no inferior a los 200 millones de euros (la remodelación del Santiago Bernabéu, por ejemplo, costó 180 millones de euros), mientras que levantar el segundo Palau Blaugrana costaría alrededor de 80 millones de euros. El resto es lo que se destinaría a acondicionar el entorno y a hacer frente a lo que se llama ‘cargas urbanísticas’. Es decir, a la construcción de aquellos equipamientos que solicitará el Ajuntament, bien en la misma zona o en otras de la ciudad, a cambio de la recalificación de parte de esos terrenos. Bien podría ser un colegio, un polideportivo, un centro de asistencia médica, etcétera...

La magnitud del proyecto conlleva un ambicioso y estudiado plan de movilidad urbana, así como la llegada a la zona de tres líneas de metro.

Se sabe que el Mini Estadi será demolido, que desaparecerán los campos de entrenamientos anexos, que habrá un hotel de cuatro o cinco estrellas, amplias zonas para pasear, aparcamiento subterráneo, grandes plazas, pero... ¿cómo será el nuevo Camp Nou?

Hay muchas ideas para la gran joya de la corona, como la llamada ‘Segunda Piel’. El perímetro de cemento del Camp Nou desaparecerá. Se pretende que exteriormente el campo de fútbol sea algo bello arquitectónicamente y agradable a la vista. Una de las ideas es recubrirlo con una tela porosa y transparente que pueda cambiar de color en función de la luz que se proyecte. Algo parecido, si bien no igual, a los paneles azules y granas de la torre Agbar de Barcelona o incluso al gran anillo blanco del Allianz Arena de Múnich. La iluminación tendrá una importancia vital en el nuevo estadio. Un estadio que ganará en capacidad y en metros cuadrados y que dentro de sus entrañas acogerá la Botiga del Barça, la Oficina de Atención al Socio, por lo que las zonas de paso entre el Camp Nou y el nuevo Palau Blau Grana serán más diáfanas.

Otra de las ideas a la que se le está dando muchas vueltas es a si es factible cubrir de forma parcial o total el Estadi. Los arquitectos dirán si se puede hacer o no y deberán tener en cuenta un factor de la máxima importancia: el césped del Camp Nou. Debido a la altura del edificio y a que el césped se bajó unos metros, así como a la colocación de los marcadores, durante cinco meses al año hay una parte del césped que no recibe el sol suficiente y su mantenimiento es muy trabajoso.
Se estuvo mirando la posibilidad de copiar el modelo del Vitesse de Arhnem (Holanda), cuyo campo de fútbol es retráctil. Es decir, el césped se mueve mediante unas guías y se saca al exterior donde el cien por cien de la hierba recibe luz directa del sol. Esta solución quedó descartada.

Los directivos azulgranas quieren, eso sí, que el Camp Nou esté dotado del máximo confort para que sus socios y seguidores se sientan lo más cómodos posible.

Los mejores goles del F.C.Barcelona

BARÇA 1 - 1 Atletico de Madrid

Hace tiempo que no vemos uno de esos Barça-Atlético que brillan por su espectáculo, con juego de gran ritmo, idas y venidas, y sobre todo goles por doquier. El partido de ayer se volvió aparecer y mucho al de los últimos años. Un Barça claro dominador del juego, ante un Atlético bien agazapado atrás esperando su ocasión para salir a la contra. Y de nuevo el equipo colchonero volvió a abandonar el Camp Nou con premio; no con los 3 puntos, pero sí con 1 muy peleado y que les vale para terminar el año en la cuarta posición que supone plaza de Liga de Campeones. Primera y segunda parte tuvieron rasgos diferentes. En ambas el claro dominador fue el Barça, con un Atlético muy bien plantado atrás y esperando su momento para salir a la contra, pero sin embargo la diferencia entre los dos periodos existió en el notable bajón físico del Barça, que no sólo desahogó al Atlético teniendo que defender acometidas culés menos veloces y más previsibles, sino que le permitió buscar la portería de Valdés con más ímpetu, encontrando el premio tras un excelente pase de Luccin al desmarque del Kun Agüero, que definió sutilmente con un toque con el exterior. La primera parte el Barça, sin llegar a su mejor nivel, jugó bastante bien. Claramente dominador de la posesión, con un Xavi e Iniesta fantásticos, dotando de un ritmo altísimo el juego culé, y buscando el gol insistentemente aunque ayer la pólvora del ataque estaba algo mojada. Fue entonces cuando el Atlético realizó una falta al borde del área completamente innecesaria, que sólo viendo a Ronaldinho perfilarse para el disparo te podías hacer una idea del desenlace. Lanzamiento al palo del portero y gol. Sin querer quitar ningún mérito a la gran ejecución del brasileño, si acaba en gol un lanzamiento de falta ejecutado al palo del portero, siempre es por fallo de este. A Leo Franco le pilló a contrapié; podría habérselo esperado, cuando Ronaldinho lanza muchas veces las faltas al palo del arquero y además estando tan al borde del área, buscar un tiro por encima de la barrera es realmente complicado, casi sin espacio para que el balón baje. Podría esperarse que con el 1-0 el Atlético se desestabilizara y el Barça pudiera encontrar más espacios en busca del segundo, pero lo cierto es que los de Aguirre no se desequilibraron, firmando una actuación defensiva realmente buena, sobre todo con Pablo y Zé Castro impresionantes en el centro de la defensa, y un Valera que salió en sustitución del lesionado Seitaridis, que frenó en todo momento a un Ronaldinho algo desquiciado, que terminó yéndose al centro tras la entrada de Ezquerro en sustitución de Gudjohnsen. Para entonces el Barça ya estaba bajo mínimos y Agüero ya había colocado las tablas en el marcador; sólo Xavi parecía fresco para dotar al juego de sentido común, pero cuando el balón llegaba a los metros finales, se estrellaba en la defensa atlética. Empate final que hace más feliz al Atlético que al Barça. Gracias a este punto los de Aguirre acaban el año en puesto de champions y los de Rijkaard segundos a 3 puntos del Sevilla, aunque con un partido menos.

BARÇA 0 - 1 Internacional: Mundialito perdido.

El Barcelona sigue sin levantar el único gran trofeo internacional que aún no figura en su palmarés, el intercontinental. El campeón de Europa acusó el esfuerzo ante el Internacional de Porto Alegre brasileño y perdio por 0-1 tras el gol de Adriano, suplente de Fernandao.
La vitrina volvió a cerrarse con el eterno hueco de la histórica Intercontinental vacío. El FC Barcelona perdió la final del Mundial de Clubes ante el Internacional de Porto Alegre por 0-1. El único cromo que les queda para completar la colección volvió a esfumarse por el desagüe, merced a un gol de Adriano en el minuto 80. El equipo español no terminó de encajar en el puzzle de la final, ante unos brasileños que engarzaron las piezas con soberbia maestría.
Ya había avisado Frank Rijkaard, desde que el equipo desembarcó en Japón, del peligro de las finales a un partido y sus malos presagios se hicieron realidad. Un gol de Adriano en un fulgurante contraataque en los últimos minutos decidió la final. El Inter se presentó como víctima, pero acabó saliendo por la puerta grande del Estadio Internacional de Yokohama, tras retener para Sudamérica el cetro mundial del fútbol de clubes.
El Barcelona repitió la alineación que desplegó en su semifinal del pasado jueves y que tan buen resultado le dio ante América de México (4-0). Rijkaard volvió a elegir a Motta, en vez de Edmilson, para reforzar el centro del campo. Abel Braga tampoco movió sus fichas y puso en la cancha el once inicial de la victoria frente al Al Ahly egipcio (2-1). Sin sorpresas en las alineaciones, el partido comenzó muy equilibrado. Los dos equipos se repartieron el control del balón, y a una jugada de peligro del campeón de Europa le sucedía otra del coloso sudamericano.
En el primer cuarto de hora de juego el Barça convirtió la banda derecha en una autopista para Zambrotta y Giuly, pero sus continuos centros no llegaron a conectar con Ronaldinho y Gudhonsen, bien vigilados por la ordenada zaga brasileña. El Inter, por su parte, trató de buscar con balones largos a su joven delantero, Alexandro "Pato", pero éste tenía en frente a un muro llamado Carles Puyol.
La primera ocasión clara para el Barcelona llegó en el minuto 18 al repeler el portero del conjunto "colorado" sendos disparos seguidos de Giovanni van Bronckhorst y Ronaldinho. Poco después, se reclamaron dos penaltis en el área del Inter, tras una entrada por detrás de Ceara a Gudjohnsen y después de que Ronaldinho, que comenzó entonces a hacer diabluras, fuera derribado por Indio. El partido se estiró y comenzaron a llegarle balones claros a Gudhonhsen, pero el islandés no tuvo su día.
Ronaldinho también parecía tener el punto de mira desviado. El "gaucho", que se enfrentaba a uno de los equipos de su ciudad natal, dispuso de un lanzamiento de falta al borde del área de los que no suele fallar. A falta de diez minutos para el descanso Ronaldinho hizo que estadio cantara gol con un disparo lejano y raso que, sin embargo, se marchó fuera pegado a la cepa del poste. El Inter se fue al vestuario después de avisar de que seguía ahí con un tiro alto de Indio.
El segundo tiempo comenzó con la entrada de Belletti por Zambrotta, en el equipo catalán, y Vargas por Alex, por parte brasileña. El encuentro entró entonces en una fase de juego espeso, sin ideas, sin desbordes. El árbitro dio la sensación de colocarse en el lado sudamericano al hacer de nuevo la vista gorda, esta vez en un claro derribo a Gudjonhsen al borde del área. Transcurridos quince minutos, Rijkaard decidió afinar la línea de creación de su orquesta e introdujo a Xavi por Motta.
El técnico del Inter juzgó entonces que necesitaba renovar la pólvora de sus delanteros y cambió a Alexandro "Pato" de 17 años, por otra joven promesa, Luiz Adriano, de 19. Xavi le dio otro aire al Barcelona. El primer balón que colgó al área estuvo apunto de rematarlo el ariete islandés y seguidamente se metió "hasta la cocina" y su centro cerca estuvo acabar dentro de la portería al ser desviado por un blocaje 'in extremis' de Edinho.
Cuando parecía que el encuentro se volcaba del lado azulgrana, el Inter, hasta entonces desaparecido, armó un contraataque que resultó letal. Corría el minuto 82, Rubens Cardoso aguantó el balón y logró superar a Puyol, el último hombre del Barcelona. A su lado vio a Adriano que entraba como un rayo y éste recogió el balón dentro del área y lo cruzó sin que Valdés nada pudiera hacer.
El centrocampista, sustituto de Fernandao, destrozó los sueños del Barcelona, en su segundo asalto al título mundial. Poco después, Ronaldinho pudo haberse erigido en salvador del Barça al ejecutar una falta pegada a la frontal del área, pero este no fue el día de la estrella brasileña, y su disparo se marchó fuera rozando el palo