SUPERBARÇA 4 - 0 Villareal

GRACIAS RONALDINHO, GRACIAS POR SER EL MEJOR JUGADOR DEL MUNDO, GRACIAS DIOS.


El Camp Nou se llenó de pañuelos blancos después de un gol antológico de Ronaldinho. El brasileño puso la guinda a la holgada victoria del Barça que jugó su mejor partido de la temporada contra el Villarreal.

El Barça recibía al Villarreal mirando a la Champions de reojo pero con la necesidad de mantener el liderato en la Liga. Un Villarreal mermado por las bajas pero con ganas de colarse de una vez entre los grandes.

Para contrarrestar las embestidas de los de Pellegrini, Frank Rijkaard volvió a tirar de rotaciones -esta vez forzadas- dando entrada a Gio, Edmílson y Thuram. Iniesta, que ya es más titular que Xavi, se mantenía en la medular junto a Deco.

Con este planteamiento, el Barça salió a por el partido pero la lata visitante no se abrió hasta que Cygan cometió un penalty más que riguroso sobre Gudjohnsen. El islandés controló de espaldas y, al girarse, notó la mano del central y se dejó caer.

Ronaldinho fue el encargado de transformar la pena máxima logrando su 50° gol con el Barça en la Liga (34'). El brasileño, cada día más en forma, igualaba además al sevillista Kanouté en la lucha por el Pichichi con 9 goles.

Polémicas a parte, lo cierto es que el Barça estaba muy metido en el partido y dominó desde el principio a un Villarreal que, mermado por las bajas, se entregó al contraataque para intentar sacar algo positivo del Camp Nou. Las pocas aproximaciones de los visitantes las resolvieron bien entre Thuram y Puyol mientras Gio y Zambrotta tenían barra libre para subir al ataque.

Después del gol, el dominio del Barça se redobló y, primero Ronaldinho y luego Deco, tuvieron el segundo gol en sus botas pero sus disparos fueron desviados a córner por el portero del Villarreal Barbosa.

Con el tanto, el Villarreal pareció asustarse y el mediocampo del Barça se hizo con el dominio absoluto del balón. Edmílson en largo y Deco e Iniesta en corto hacían diabluras en la medular habilitando a los tres puntas del Barça. Y hasta Gio estuvo a punto de marcar a dos minutos del descanso de cabeza pero, de nuevo Barbosa, en un vuelo imposible, evitó el gol.

GUDJOHNSEN E INIESTA VOLVIERON A 'MOJAR'

En la segunda parte el Barça salió dispuesto a sentenciar y pasó por encima del Villarreal como un huracán. Primero una gran combinación entre Ronaldinho, Deco y Gio terminó con disparo demasiado cruzado del holandés. Luego el brasileño perdía un balón franco en el área cuando Barbosa había salido a por uvas y por último, todavía sin cumplirse el minuto 5, Deco cruzaba a la derecha del meta del Villarreal después de una buena jugada de Ronaldinho.

Toda una declaración de intenciones que culminaría Iniesta en el minuto 9 colándose en el área visitante por el carril derecho y sacando un centro medido a la cabeza de Gudjohnsen. El islandés, desmarcado y solo en el segundo palo, sólo tuvo que empujar al fondo de las mallas (2-0, 51').

Premio merecido para un Guddy muy trabajador todo el partido, presionando, creando espacios para los compañeros y jugando con mucho criterio de espaldas a la defensa. Cinco goles lleva ya el ex del Chelsea que empieza a callar bocas.

Algo parecido a lo que le ocurre a Iniesta. El de Fuentealbilla, cada día más inspirado, se coló en el área y remató de forma acrobática al fondo de la red un centro precioso de Zambrotta (3-0, 70').

Ya con 3-0, el Villarreal tuvo la mejor ocasión del partido. Barullo en el área de Valdés -con disparo al palo de Forlán incluido- que terminó despejando bien la defensa.

Con el partido encarrilado Rijkaard dio entrada a Xavi y Ezquerro por Giuly y Gudjohnsen respectivamente pero no varió ningún planteamiento. El Barça dominaba y marcaba, y cuajaba uno de sus mejores partidos. La entrada de Oleguer por Edmílson completó la rueda de cambios y parecía que pondría fin al partido pero...

LA GUINDA LA PUSO EL MEJOR: RONALDINHO

Con todo visto para sentencia, con el Barça jugando seguramente sus mejores minutos de la temporada, volvió a aparecer el mejor Ronaldinho.

El Barça embotellaba al Villarreal, faltaban cinco minutos para el final cuando Xavi recogió un balón en la derecha del ataque, centró al segundo palo donde Ronaldinho controló con el pecho y, sin dejar caer el balón al suelo, ni siquiera sin girarse, enchufó una chilena al fondo de las mallas de Barbosa.

Extasiado, el Camp Nou se llenó de pañuelos blancos para celebrar uno de los mejores goles que ha visto jamás el coliseo azulgrana. Un gol para quitarse el sombrero que ponía de manifiesto que Ronaldinho es, por mucho que digan L'Equipe y Cannavaro, el mejor jugador del mundo.

El Barça sigue siendo líder, Ronaldinho se queda como pichichi en solitario -10 goles lleva- y el equipo certificó que, como el crack brasileño, cada día juega mejor. Buena noticia antes de viajar al campo del Levante y, sobre todo, antes del decisivo partido de Champions del día 5 contra el Werder.